Prolube tiene las primeras mecánicas mujeres del país

Primeras Mecánicas Mujeres Del País

 

La red de servicio automotriz incorporó a tres estudiantes mujeres entre sus pasantes de este año, hecho inédito en los talleres de Argentina.

La metodología de pasantías fue inaugurada en Prolube en el año 2022, a lo largo del cual la empresa recibió a más de 20 estudiantes de oficios vinculados a la mecánica que realizaron sus prácticas profesionales junto a operarios experimentados.

Hasta hace no mucho tiempo, el rubro automotriz  estuvo asociado casi exclusivamente al mundo masculino. Si bien al día de hoy la industria sigue teniendo mayoría de hombres en todas sus áreas, la presencia femenina en diferentes puestos es cada vez más notoria.

En Prolube, las mujeres forman parte de todos los equipos de trabajo (auditoría, RRHH, administración, asesoría financiera, prensa y difusión, etc.) desde el surgimiento de la marca, además de tener presencia en cada uno de los locales mediante el puesto de Manager Auxiliar, con funciones administrativas y de atención al cliente. Tampoco se quedan atrás las aventureras que deciden sumarse a la red a través del sistema de franquicias y ya son varias las socias concesionarias de la marca.

La grata noticia de este año viene acompañada de tres jóvenes pasantes de 18 años, Giuliana García, Agustina Triolo y Micaela García, que se convirtieron en las primeras mujeres en pisar y operar los talleres de la marca. Las tres estudiantes se desempeñan a la par de sus compañeros, demostrando excelentes niveles de adaptación y aprendizaje y desterrando mitos sexistas vinculados a la profesión.

Mecánica y sexismo: palabra de ellas.

Si bien actualmente somos testigos de un proceso de cambio social en cuanto a la temática de género, aún existen ciertas reticencias que generan que muchas mujeres sigan sintiéndose excluidas o discriminadas en ciertos campos que, en el pasado, se adjudicaron culturalmente al género masculino.

“Entre todos los talleres que tuvimos en el colegio, el de automotores fue el que más me llamó la atención, incluso hice clases de más porque me interesaba mucho” contó una de las pasantes, agregando que “está muy normalizado que la mecánica se relacione con el género masculino. Creo que los jóvenes no tienen problemas al respecto, al menos mis compañeros y mis amigos. Las personas más grandes, por lo general, sí tienen esa visión y marcan la diferencia entre hombres y mujeres. Los mismos profesores me enseñaron con un trato bastante indiferente”.

En este contexto, al ser consultada sobre los motivos que la llevaron a estudiar mecánica, otra de las pasantes respondió: “mi mamá me apoyó desde un principio y me alentó a estudiar lo que yo quisiera porque, cuando ella era chica, quería ser militar o policía y su papá no la dejó. Sin embargo, estudió de grande y, finalmente, hoy es policía. Ella me inspiró a estudiar lo que realmente me gusta y hoy estoy feliz aprendiendo sobre eso en Prolube, donde me siento muy cómoda. Si pudiera aconsejar a otras chicas, les diría que se animen porque, a pesar de que a veces sí las van a hacer sentir excluidas, también habrá lugares donde podrán sentirse bienvenidas”.

Con relatos similares, las tres pasantes indicaron haber sufrido, en algún momento de sus estudios, algún tipo de discriminación o exclusión relacionada con su género. “Todos los días tengo que luchar contra el machismo de muchos profesores que no toleran que sea buena en las mismas tareas que realizan ellos. También he recibido muchos comentarios sobre no dejar de ser femenina por estudiar mecánica. Si bien hay muchas personas que me apoyan, sigo teniendo que demostrar todos los días que valgo para estar donde estoy y que soy buena en lo que hago. Mi meta es ser ingeniera electromecánica y trabajar con autos, y creo que hay que atreverse a ser y hacer lo que una quiera, sin miedo y con seguridad” agregó la tercera pasante.

Aunque estos relatos arrastran de fondo un tinte amargo, también demuestran motivación y aliento para todas las chicas que se sientan intimidadas a estudiar o dedicarse a ciertos campos socialmente negados a las mujeres. Por eso es fundamental que las empresas y organizaciones de distintos tipos, incluidas las escuelas y unidades académicas, estén a la altura de las circunstancias para fomentar el aprendizaje y desarrollo profesional para todos los estudiantes por igual.

Si querés trabajar en Prolube, podés enviar tu solicitud y tu CV a través del siguiente link: https://prolube.com.ar/recursos-humanos/

 

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